Como hemos visto en entradas
anteriores, la animación es un recurso muy empleado en los
vídeos musicales, ya que permite una realización muy
original y creativa. Varios grupos han dado a conocer visualmente sus canciones utilizando
diversas técnicas. Aquí tenéis la prueba de ello:
Chris Martin, el vocalista del grupo Coldplay, se convierte en un superhéroe animado que se enfrenta a diversos obstáculos con el objetivo de salvar del peligro a su princesa. Se trata de un trabajo realmente laborioso, en el que la animación es la protagonista por excelencia. Un mundo creado a partir de dibujos hechos con tiza en una superficie llana, donde los personajes cobran vida e interactúan con el protagonista. Consiguen captar la atención del espectador, involucrarle en un mundo fantasioso del que nos abstraemos antes de que se termine el vídeo, ya que en los últimos segundos, el cantante se levanta del suelo y la secuencia deja de ser animada.
Otro de los grupos que se suman al carro de animar sus videoclips es Radiohead. Tobías Stretch fue el encargado de llevar a cabo el vídeo musical de la canción Weird Fishes. Se percibe un gran contraste entre la naturaleza y los personajes animados que aparecen sobrevolando los bosques o metiéndose en el río.
The White Stripes apuestan por piezas de Lego para dar vida a un grupo musical muy logrado.
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